Gran Turismo 7 VR: ANÁLISIS

6 MAR 2023  14:00

Hugo

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Gran Turismo 7 VR: ANÁLISIS

Abróchate el cinturón y ponte al volante de tu coche favorito en esta esperada adaptación VR del último título de la afamada saga Gran Turismo en exclusiva para PlayStation VR2.

Gran Turismo, de lo clásico a la VR

Hoy nos toca hablar sobre Gran Turismo 7 y su esperada adaptación a realidad virtual. La ya mítica saga de conducción referencia dentro del ecosistema PlayStation da el salto a VR con una esperada actualización gratuita para todo aquel que disponga del juego (y de PSVR2).

 

Antes de comenzar a diseccionar el juego, queremos aclarar que nos vamos a centrar en cómo se ha adaptado el juego al medio VR, y dejaremos un poco de lado el análisis detallado de todo lo que trae el juego de por sí, ya que se han vertido ríos de tinta en la inmensa mayoría de medios generalistas sobre este juego, y nosotros preferimos detenernos en la experiencia VR más allá de dar alguna pincelada sobre lo que nos encontraremos en el juego.

 

 

Gran Turismo 7 nació después de una largo periodo de descanso, donde Polyphony Digital con Kazunori Yamauchi al frente, el estudio encargado de dar forma a los Gran Turismo, se saltó una generación entre Gran Turismo 6 y Gran Turismo 7, donde solo pudimos ver (en PS4Gran Turismo Sport, un juego más enfocado a los eSports y que contaba con un pequeño modo de juego en realidad virtual para PSVR, un despropósito en líneas generales que nos dejaba la miel en los labios con una carrera contra un solo adversario y donde podíamos desquitarnos un poquito en el modo contrarreloj. Eso sí, era más que suficiente para demostrar que si Polyphony Digital se ponía manos a la obra y nos daba un Gran Turismo al completo en realidad virtual nos lo íbamos a pasar como un niño con juguetes nuevos. Es por ello que muchos amantes de esta popular saga esperábamos como agua de mayo este Gran Turismo 7 y su promesa de traernos el juego al completo en VR.

 

Yamauchi, el afamado creador de la saga y ex-piloto de carreras, siempre ha tenido palabras de halago sobre la realidad virtual y cómo puede ser un punto de inflexión en los juegos de conducción, por eso y hasta que no se oficializó Gran Turismo 7 era muy comedido con sus declaraciones al respecto, y dejaba caer en diferentes entrevistas que la decisión de traer modos de juego tan limitados en VR a GT Sport era por el hardware de PS4 y como lastraba la experiencia en general. Por eso, una vez presentado de forma oficial GT7, era habitual escucharle hablar sobre las bondades de la VR en sus declaraciones y cómo le gustaría que se implementaran en el futuro. Todo esto lo único que nos dejaba claro a los seguidores de la saga es que era cuestión de tiempo el poder disfrutar de un GT completamente en VR, como así se oficializó hace solo unos meses, concretamente este 5 de enero, al confirmar por medio de un evento en el CES que GT7 tendría soporte para realidad virtual para PSVR2. 

 

Una oda al automovilismo

Tal y como comenzábamos nuestro análisis particular de esta adaptación al medio VR, no nos detendremos mucho en diseccionar el juego al completo, y nos centraremos más en cómo es la experiencia VR en general, pero eso no significa que obviemos ciertos aspectos del título que siempre está bien realzar. Y es que si algún adjetivo o frase hecha puede definir esta última entrega de la saga GT, es sin duda que estamos ante un juego hecho por y para los amantes de los coches y todo lo que tenga que ver con su historia.

 

Desde el primer momento que accedemos a Gran Turismo 7 podemos palpar que se han hecho grandes esfuerzos por enseñarnos el pasado, presente y futuro de cada marca de coches presente en el juego, un recorrido por algunos de los modelos más míticos de las grandes marcas del automóvil de cualquier época y cómo se han ido dando a conocer.

 

El juego basa su trama principal en el apartado café, un simbólico bar/restaurante al que accederemos para ir echando un vistazo por las cartas de menús, los cuales son a su vez las cartas de presentación de los modelos más emblemáticos de cada categoría o marca de la historia automovilística, con un amplio recorrido por sus particulares historias que para todo amante de la historia de los coches es todo un acierto.

 

Este modo de juego, a su vez, nos va implementando objetivos y pequeños campeonatos en forma de carreras mientras vamos desbloqueando las diferentes pistas y circuitos, así como el resto de modos de juego, y es que en Gran Turismo 7, a medida que avanzamos por la trama principal de este modo café, iremos desbloqueando el resto de modos tradicionales de la saga, como son las licencias de conducción clásicas, los modos Sport o multijugador, la tienda tuning, la tienda de piezas, los escapes o las tiendas de segunda mano entre otros, y solo disponemos de inicio de los modos árcade, exhibición y el rally musical.

 

Como broche final a esta pequeña introducción sobre lo que nos encontramos en GT7, solo aclarar que el juego sufrió unas inexplicables notas negativas a lo largo y ancho del panorama videojueguil, siendo como es, el Gran Turismo mejor acabado de todos hasta la fecha, el que más se aleja del sim-cade y el que más se asemeja en cuanto a físicas a los simuladores más reconocibles del panorama simracing, y sin llegar a ser tan realista en cuanto a físicas se refiere en comparación con los principales referentes del mercado, lo cierto es que si desactivamos todas las ayudas que por defecto vienen activadas en el juego, así como si activamos las diferentes mecánicas de realismo (por ejemplo si chocamos contra un muro que no nos escupa de manera premeditada hacia la pista de nuevo), lo cierto es que se queda en un juego que se aleja un poco de ese sim-cade que parece a priori y se acerca muchísimo más de lo que muchos se esperan a los simuladores más tradicionales. Eso sí, gracias a este tipo de ajustes, tanto jugadores experimentados como casuales se pueden dar cita sin problemas por el universo Gran Turismo en esta última entrega.

 

Gran Turismo 7 VR

Después de esta breve introducción vamos a lo que nos importa a nosotros, cómo es esta adaptación a la realidad virtual de GT7. Y es que esta vez sí disponemos de un juego de la saga completamente adaptado a VR, y vamos a intentar transmitir que sensaciones tenemos al volante de nuestro coche favorito como solo la VR sabe hacer.

 

No es la primera vez que Kazunori Yamauchi habla de las bondades de la realidad virtual y cómo le gustaría que sus juegos fueran en VR. La infame versión VR de GT Sport no dejaba en buen lugar a lo que se espera de un título que tiene manga ancha para gastar en el desarrollo de sus juegos por parte de PlayStation, es por ello que gracias a la potencia de PS5 y si se saben aprovechar las bondades de PSVR2 a nivel técnico, podríamos estar ante un portento en realidad virtual para el nuevo visor de Sony.

 

Lo primero que llama la atención, es que no tenemos nada en VR por los menús, algo que choca en un primer momento al ver que todo se desarrolla como hasta ahora en GT7 en pantalla plana y hacemos uso del modo cinemático, tanto en menús como en cualquier apartado que no sea una carrera o la galería VR, eso sí, todo completamente traducido al español. A título personal, no me afecta mucho que el juego en sí se ejecute en este modo cinemático a excepción de las carreras, que es lo que de verdad importa, pero es cierto que hubiera estado genial tener algo de interacción VR o ver los diferentes menús en estereoscópico mientras seleccionamos cualquier opción disponible.

 

Otro de los puntos a tener en cuenta es el hecho de que nuestros VR Sense (mandos de movimiento) no son compatibles con el título, y si quieres jugar al juego sí o sí tendrás que hacer uso de un volante compatible o de nuestro DualSense, mando que por cierto se comporta a las mil maravillas en este título como ya se demostró en este mismo juego en pantalla plana, y puede ser una gran baza a tener en cuenta (o la única) si no dispones de volante compatible. El uso de los motores de vibración, así como de los gatillos adaptativos, nos da ese plus de sensaciones en la pista que a nosotros nos ha encantado. Además, podemos activar los diferentes giroscopios (six-axis) para que incluso moviendo nuestro mando como si de un volante se tratara el coche gire en una dirección u otra, haciendo de este ajuste todo un acierto para quien se encuentre cómodo con ello.

 

Eso sí, la mejor manera de disfrutar de este juego, como no podría ser de otra manera, es con un volante compatible. La inmersión que se logra en realidad virtual en cualquier juego de conducción es innegable per se, pero gracias a este periférico la inmersión se multiplica. Además, en GT7 se ha trabajado muchísimo para intentar transmitir de la mejor manera las sensaciones con el force feedback y gracias a ello podemos incluso notar las diferentes adherencias de la trazada, no es lo mismo ir por una pista seca, por un piano o pisar un charco, y GT7 lo transmite fielmente, tanto en volante como con el DualSense, una maravilla para los sentidos que hace que la inmersión sea muy buena.

 

Otro de los factores a tener muy en cuenta es el hecho de que nuestro HMD tiene respuesta en forma de vibración, y en GT7 es todo un espectáculo, desde vibraciones sutiles cuando algún contrincante nos roza con su coche a otras más considerables cuando somos embestidos o sufrimos un accidente contra el muro de turno. Eso sí, se echa en falta un poco más de esta nueva droga que es la vibración en nuestro HMD en otras circunstancias, como por ejemplo cuando llueve torrencialmente y vamos con un coche descapotado, o cuando nos salimos de pista y vamos campo a través sin control con un vehículo de ruedas lisas, pero sin duda es todo un acierto que logra trasmitir su cometido fielmente y que se nos antoja difícil vivir sin ello cuando estemos con otro visor en otro simulador de carreras, esperemos que en futuros visores sea la norma a seguir y nos encontremos con estas delicias tecnológicas para nuestros sentidos.

 

Prueba de eye tracking en GT7.

 

Como comentábamos, digamos que el juego en general está en modo cinemático, pero lo que de verdad nos importa, que son las carreras, están en realidad virtual y desde luego GT7 en su versión VR cumple con nota. Simplemente, tendremos que tener nuestro visor PSVR2 encendido y lo reconocerá al instante, empezando la carrera con la típica cuenta atrás de 3,2,1 donde en el último paso de esta cuenta atrás accederemos al habitáculo en realidad virtual. Quizá nos hubiera gustado que desde el comienzo de la cuenta atrás pudiéramos estar dentro del habitáculo en realidad virtual y poder embobarnos un poco más con el nivel de detalle de los interiores antes de pasar a la acción, pero desde el estudio de desarrollo se ha optado por esta manera de acceder al mundo VR de GT7, y quitando apreciaciones personales, lo cierto es que es correcto en líneas generales.

 

Por otro lado, si intentamos sacar nuestra cabeza por fuera de la ventanilla o nos acercamos demasiado al salpicadero, nos adentraremos en un fundido a negro, pero con la particularidad de que veremos como un mallado verde con la estructura de nuestro coche.

 

Resulta curioso que no encontremos ni rastro del típico menú con los ajustes de confort habituales en realidad virtual, por no haber no hay ni un ajuste para activar blinders, lo cual puede ser un problema para la gente más susceptible a los mareos en VR, donde los juegos de conducción suelen ser una prueba de fuego en este caso. Lo único que podemos ajustar son temas de exposición para regular el brillo y poco más.

 

Otro de los puntos curiosos en nuestras pruebas es que da la sensación de que las carreras no lucen al máximo rendimiento que se le presupone a nivel visual, lo cual es algo extraño. No nos malinterpretéis, ya que aunque todo luce espectacular y con muy buena calidad, lo cierto es que nos da la sensación de que no saca el partido que debería a nivel visual a excepción de un punto del que hablaremos más adelante, por lo que esperamos que en un futuro se adapte como se merece este juego mediante algún parche que incluso haga que se vea mejor de lo que se ve hoy en día, que ya es mucho.

 

Como añadido, se vuelve a hacer un gran uso del eye tracking y el foveated rendering en este juego, gracias a nuestras pruebas hemos podido ver directamente cómo actúa esta tecnología y cómo hace que siempre veamos todo como se merece, al máximo de calidad.

Al volante en VR

Las carreras en GT7 son espectaculares, y en RV lo son más aún como os podéis imaginar. La propia resolución del visor unido a la potencia del hardware hace que por fin tengamos una experiencia de Gran Turismo como dios manda en VR para PlayStation. Desde Polyphony Digital nos hablaban de que cada coche se diseña al milímetro con una tecnología de rastreo única, y según comentaban cada coche les llevaba unos ocho meses el darle forma dentro del juego y en realidad virtual se plasma a la perfección, los interiores quitan el hipo, el nivel de detalle roza lo absurdo en el buen sentido de la palabra, y en exteriores más de lo mismo, donde ya nos explayaremos más adelante al respecto.

 

Uniendo la espectacularidad de cada carrera, los factores de vibración en HMD y mandos/volante más la calidad gráfica del título hacen que sin duda nos encontremos ante uno de los juegos de conducción que más impacta al que lo juega. Por otro lado, en GT7 también se hace un uso notorio del HDR, otro de esos factores de los que no sabemos cómo vamos a sobrevivir cuando nos pasemos a otro visor sin esta tecnología, y es que el ir a 300 km/h por una recta en Nürburgring mientras tus rivales te dan las largas por el retrovisor pidiéndote paso a la par que te deslumbran hace que sea toda una experiencia en sí misma. El sol del atardecer como se entremezcla con el entorno mientras te "ciega", lo que hace que nos preguntemos de nuevo por qué no se ha implementado el HDR antes en los visores en realidad virtual. Claro está que con eso solo no basta, pero desde el estudio de desarrollo parece que se han tomado en serio sacarle partido a esta tecnología como se merece y en GT7 se hace de manera soberbia.

 

Uno de los puntos que más nos llamaba la atención, sobre todo y como es mi caso para aquellos que venimos de simuladores en PC VR, es cómo se resolvería el tema de la lluvia en GT7 VR, y es que no hay que ser ingeniero aeroespacial para saber que la lluvia consume muchos recursos en RV. En GT7 tiene nubes y claros, nunca mejor dicho, puesto que hay situaciones que te dejan una sensación de cara desencajada para bien, como las lluvias fuertes y torrenciales mientras ves cómo las gotas se abren camino por la luna delantera del coche y los rivales desprenden esa cortina de agua según te pasan a toda pastilla. Por otra parte, en lluvias débiles o moderadas ni vemos gotas caer en pista, ni vemos cómo los limpiaparabrisas actúan, ni tampoco cómo esas gotas caen por las diferentes lunas de nuestro vehículo, en esta situación todo lo arreglan con el tono grisáceo típico de este clima y poco más. Eso sí, es toda una pasada ver la formación de charcos de agua mientras se refleja el entorno, o cómo se va secando la parte del trazado por el que pasan los coches.

 

Además, y como añadido a las carreras en realidad virtual, también tenemos repeticiones en VR, y es que ya en pantalla plana, uno de los reclamos visuales más fuertes del juego eran las propias repeticiones, donde se rayaba el fotorrealismo y el apartado gráfico y visual nos dejaba sin aliento. En esta ocasión se intenta en cierta manera lograr esa espectacularidad en VR, pero se queda a medio camino. Sí, igualmente nos deja perplejos ver cómo van los coches a toda velocidad desde planos fijos que son todo un acierto, pero tenemos un par de peros que nos dejan un sabor de boca agridulce al respecto. Por un lado, tenemos la sensación de que se ha acelerado la velocidad de los coches en estas repeticiones en busca de más espectacularidad, pero en detrimento del realismo del que intentan presumir sus desarrolladores, y por otro lado, es quizá en el punto donde más se aprecia el ghosting por reproyeccion de todos los juegos que hemos probado en PSVR2 hasta la fecha, afeando y mucho la experiencia en este sentido. Mientras escribíamos estos párrafos, Polyphony Digital ha liberado una actualización que mitiga en cierta parte este apartado, pero de momento para nosotros es insuficiente y seguimos acusando este defecto, que esperemos se mitigue en el futuro con nuevas actualizaciones.

 

Galería VR

Aunque resulte raro destinar todo un apartado a un modo menos principal, como es en este caso, la galería de un juego, aquí tenemos que hacer una mención aparte, y es que el modo galería VR de GT7 es sencillamente brutal, rayando el fotorrealismo extremo. Estamos ante otro de los techos gráficos en cuanto a realidad virtual se refiere, simplemente estar delante de cualquier coche en los cuidados entornos disponibles de este modo es para quitarse el sombrero, el uso de la iluminación una vez más usando de manera magistral el HDR, la proyección de sombras y el nivel de detalle que se logra es de verdad todo un hito a nivel técnico.

 

En este modo podemos pasear alrededor del coche que elijamos de nuestro garaje o incluso de cualquier tienda disponible en el juego, para maravillarnos visualmente hablando de lo que tenemos delante. Apreciar cada rincón de nuestro coche a este nivel gráfico es una bestialidad, además podemos entrar en el habitáculo para terminar de maravillarnos mientras ponemos los intermitentes o simplemente encendemos las luces del cuadro de mandos, pero aunque no haya mucho más que hacer que solo contemplar nuestro coche en una ubicación destacada del globo, lo cierto es que es toda una experiencia en sí misma.

 

Por poner un "pero", no nos ha gustado la manera de movernos por el entorno, ya que nos resulta demasiado lento. Además, para girarnos lo haremos de manera gradual, así como elevarnos o agacharnos también es gradualmente, por lo que en este modo es más que recomendable que levantes tú trasero de la silla o sofá donde estés y lo recorras tu físicamente hablando. Aun así, esperamos que en un futuro parche se pueda ajustar el modo de movernos por el entorno en los ajustes de rigor.

Sonido 3D y ambientación sonora

Otro de los puntos fuertes dentro de este GT7 es sin duda la lograda ambientación sonora que disponemos, ya en pantalla plana el juego hacía gala de un logrado acabado en este aspecto haciendo un buen uso del chip Tempest-Sound que incluye PS5 en su hardware. Por ello y gracias al posicionamiento 3D del audio en VR se logra un gran equilibrio en este aspecto, logrando transmitir de manera fidedigna cada sonido y cada matiz audible en nuestros oídos mediante nuestro visor.

 

Cuando estamos en plena carrera y por ejemplo rompe a llover o a diluviar, la mezcla de sonidos se hace muy fiel a lo que supondría en la vida real, mientras escuchamos las gotas de lluvia resonar por el chasis de nuestro coche, unido al propio sonido del motor del coche que conducimos, mientras adelantamos a los coches de alrededor cada uno con su sonido apreciable y particular, es una maravilla para nuestros oídos, donde incluso podemos apreciar el sonido del viento o del helicóptero de retransmisiones de turno mientras nos sobrevuela.

 

Como añadido, y al igual que ya se destacaba en la versión de pantalla plana, GT7 cuenta con una gran banda sonora llena de versiones de grandes clásicos de la música de todas las épocas y que siempre está bien destacar en nuestros análisis.

Conclusión

Gran Turismo 7 en VR, lleva la conducción en realidad virtual a otro nivel en cuanto al apartado audiovisual se refiere, una maravilla para nuestros sentidos virtuales que hace un uso excelente de las diferentes tecnologías presentes en PSVR2, como son el HDR, la vibración de nuestro HMD, el uso de los gatillos adaptativos si utilizamos el DualSense o la propia potencia de PS5.

 

En cambio, tiene algunos grises como el ya famoso ghosting que está acompañando los títulos más destacados de PSVR2 en estos primeros compases de vida del visor que utilizan la reproyeccion como es el caso de este GT7, quizá solo se destaque en las repeticiones VR, ya que al estar en carrera no te fijas tanto sobre lo que vas dejando atrás, y sobre todo no lo ves a la misma velocidad que cuando estamos en las repeticiones VR al estar estáticos, pero estar está, y también la decisión de poner los diferentes menús y opciones disponibles en modo cinemático no es la mejor carta de presentación para los que peinamos canas en los universos virtuales inmersivos. Además, da la sensación de que el título no rinde a nivel visual tanto como se esperaría en carreras, dejándonos la sensación de que se podría llegar incluso a más después de ver la espectacularidad del modo galería VR. Aún así, el juego luce muy bien, tiene un apartado técnico y gráfico a la altura de lo que se espera, pero puestos a pedir nos hubiera encantado ver esa potencia gráfica también en las carreras.

 

Por otro lado, la espectacularidad de cada carrera, el poder sentir que estás dentro de cada coche y el buen hacer cuando nos encontramos al volante a toda velocidad, hacen que cada "pero" de este juego se diluya a pasos agigantados, convirtiéndose en otro de esos imprescindibles para PSVR2 si te gustan los juegos de conducción.

 

El punto y aparte se lo lleva el modo galería en VR, donde el despliegue técnico, gráfico y visual que se abre ante nosotros nos deja con la boca abierta y nos hace replantearnos si ese apartado gráfico lo hemos visto en otros títulos a lo largo y ancho de la realidad virtual.

 

En definitiva, un magnífico juego de conducción que sabe adaptarse como merece a la realidad virtual de PSVR2 y que le encantará a la inmensa mayoría de usuarios que le den una oportunidad.

 

El juego ha sido analizado con PlayStation VR2 en PS5.

+ La galería VR quita el hipo

+ Uso magistral del HDR

+ Uso de force feedback con volante muy bueno

+ Uso del DualSense espectacular

+ Gran apartado sonoro

+ Vibración del HMD muy inmersiva

+ Imprescindible si te gustan los coches y tienes PSVR2

+ Espectacular...

- ...pero con la sensación de que puede dar más de sí

- Sin menús en opciones VR

- Quitando las carreras y la galería VR, el resto está en modo cinemático

9 "Muy bueno"

Gran Turismo 7 (PlayStation 5)

9

Lanzamiento / Febrero 22, 2023

Ponte al volante de más de 400 coches desde el primer día y recorre más de 90 circuitos con condiciones climáticas dinámicas. Todos los vehículos, desde los modelos más clásicos a los supercoches ...

Nota de los usuarios

9