OhShape: ANÁLISIS PSVR

1 OCT 2020  13:00

Dark

8

OhShape: ANÁLISIS PSVR

Utilizando nuestro cuerpo como herramienta, OhShape se desmarca del resto de juegos de ritmo y titubea con el fitness para hacernos sudar y despejar nuestros salones, ahora en PSVR.

Un baile diferente

Ha llovido ya desde su estreno original, navidades del pasado año sin contar su previo early access, pero al fin le ha tocado el turno al visor de Sony para poder disfrutar de esta suerte de concurso de televisión para muchos y juego musical para otros.

 

 

OhShape a fecha de hoy ya es un juego completo, con cerca de una treintena de canciones, un amplio selector de dificultad y modos de juego para una buena reunión con amigos.

Yo contra el muro

Como en cualquier otro juego musical, nos colocamos en el centro del escenario y esperamos a que lleguen las "notas" hasta nosotros, en esta ocasión reemplazadas por diferentes tipos de muros. El principal atractivo del juego es colocarnos en la pose correcta para hacer encajar nuestro cuerpo en las siluetas marcadas. Si lo hacemos bien encadenamos aciertos para multiplicar la puntuación de la canción, siendo descalificados si cometemos demasiados errores consecutivos, una mecánica bien conocida por todos.

 

 

Además de las siluetas, tocará esquivar los muros naranjas a izquierda, derecha o incluso agachados (sí, muy Beat Saber), recoger unas pequeñas gemas simplemente tocándolas y por último, golpear los muros rojos en los puntos indicados.

 

El dinamismo y agilidad que nos pide el juego es bastante alto, sobre todo en dificultades elevadas, pero resulta curiosamente atractivo enfrentarnos a ciertas poses para, en su conjunto, generar una especie de coreografía. El trabajo del estudio en la versión para PSVR es francamente bueno, y a pesar de sus limitaciones en el tracking, todo funciona a las mil maravillas.

 

Falta de sinergia

Por desgracia, y a pesar de tener un muy buen concepto base, OhShape peca de inexperiencia a la hora de hacernos sentir el ritmo. Todos los muros pasan ante nosotros al mismo compás, uno tras otro, perdiendo esa sensación tan agradable de los grandes juegos rítmicos y, dicho sea de paso, de la esencia musical: cambios de velocidades, cantidad de notas simultáneas, momentos de calma...

 

Esto provoca que percibamos cada canción como una sucesión de acciones inconexas sin posibilidad de memorizar en muchos casos cual es el siguiente movimiento o perdiendo esos bailes únicos en determinadas canciones como sí sucede en otros juegos de baile en los que se nos pide mover el cuerpo, como puedan ser Just Dance o Dance Central. Indirectamente, este hecho condiciona la libertad de movimiento, haciendo que su jugabilidad sea más rígida de lo que pudiera parecer en un principio.

 

 

Si bien es cierto que los últimos temas mejoran bastante, el conjunto global hace que esa falta de tacto esté presente a lo largo de nuestras sesiones de baile.

 

Hay cierto descontrol y ausencia de feedback hacia el jugador cuando realizamos una acción con éxito, algo muy importante en un producto donde la silueta que muestra el muro puede no corresponder con el físico del jugador.

 

Esto se acentúa sabiendo que el juego es muy exigente en cuanto a la zona de juego requerida, y que se basa de forma irremediable en la estatura del jugador más que en ningún otro título, por lo que se antoja necesario reforzar las acciones positivas. Por suerte, es configurable un área de juego menos amplia a pesar de penalizar la puntuación final del jugador.

 

Romper los muros, recoger las gemas… todo necesita esa recompensa visual o sonora para saber que lo estamos haciendo bien. Sin embargo, aquí no encontramos esa unión de música y gameplay, dando la sensación de estar "ante algo" en lugar de ser parte de la melodía.

 

Tres álbumes por bailar

Los usuarios de PSVR están de enhorabuena, ya que OhShape llega con (casi) todo el contenido publicado hasta el momento para el resto de plataformas, lo que implica disfrutar de cerca de 30 canciones de estilos variados: rock, pop, funky, rap… bastante propicios para el estilo de juego y su abstracta a la par que virtual estética, muy icónica del producto, sintiéndose agradable en todo momento.

 

Si bien es cierto que los temas no tienen la fuerza y el gancho que se espera para el género, cumplen y funcionan bien, sobre todo incentivando al jugador a moverse y quemar calorías, que al final es lo que pretende (aunque no contemos con contador de éstas).

 

Un detalle que llama la atención es la alta compresión que tiene todo el apartado sonoro, y que muchas veces genera cierto ruido y neblina con los temas perdiendo nitidez, algo que en un producto donde el audio es tan importante resulta llamativo.

 

 

El reto que ofrece OhShape es bastante alto por la cantidad de movimiento que exige, pero los cuatro niveles de dificultad que incluye están bien adaptados para ir mejorando cada vez más y no encontrarnos con requisitos imposibles.

 

Además de contar con tablas de clasificación online, el modo Party es un buen añadido para jugar con amigos en casa, con rankings propios para cada sesión. Sin duda, una buena excusa para disfrutar de la RV con otras personas en la misma sala.

 

CONCLUSIÓN

OhShape parte de una buena idea haciéndonos completos protagonistas de un juego rítmico, y lo intenta aunque no sea del todo satisfactorio: la falta de sinestesia rítmica, la carencia de feedback al usuario y lo restrictivo de su propia propuesta hace que el juego de Odder Labs necesite pulir su fórmula.

 

Por suerte, su gameplay resulta lo suficientemente atractivo como para poder disfrutarlo sin problemas con gran variedad y cantidad de temas que, aunque les falte ese punch en su gran mayoría, cumplen su cometido. OhShape es un paso adelante adelante en un género que está viviendo una nueva juventud en la realidad virtual. Tan sólo necesita darlo con más firmeza en el futuro.

 

Análisis realizado en Playstation 4 Pro.

+ Propuesta de juego muy interesante.

+ Estilo visual limpio y llamativo.

+ Variedad y cantidad de temas con selector de dificultad.

+ Clasificación online y local para jugar con amigos en casa.

+ El tracking funciona de maravilla.

- Una sucesión de paredes, muchas veces sin el ritmo necesario.

- Para ser un juego donde mover el cuerpo, su propuesta es demasiado rígida.

- Falta de feeback sonoro y visual.

- Los temas no están a la altura de otros títulos.

- La compresión en el audio.

- Necesita mucho espacio físico para no tener problemas con algunas posturas.

- Sin el editor de otras versiones.

7 "Muy bueno"

OhShape (PlayStation 4)

7

Lanzamiento / Septiembre 24, 2020

OhShape es un juego VR de ritmo que ofrece una forma única de mover todo tu cuerpo. Esquiva obstáculos, golpea muros y haz poses divertidas para superar cada nivel. ¡Juega con las monedas para ser ...

Nota de los usuarios

?