Death Horizon: Reloaded - ANÁLISIS

¿Otro juego de zombis?

Death Horizon: Reloaded es la versión 6dof del juego lanzado para la plataforma Oculus Mobile (Death Horizon). Esta nueva versión incorpora la posibilidad de desplazarnos libremente en lugar del sistema original que nos llevaba "sobre raíles". Para la locomoción, el título actualmente permite elegir entre movimiento libre con el stick o teletransporte. La opción recomendables es la de movimiento libre, y es que, aunque inicialmente no venía incluida con el juego, se sumó más tarde como una actualización gratuita, mejorando bastante el gameplay.

La historia del juego nos sitúa en una epidemia zombi ocasionada por un brote del virus T12 que se desarrolla en el laboratorio de investigación científica Horizon, por lo que nuestra misión consiste en atravesar todos los niveles del laboratorio y acabar con todos los zombis que se pongan en nuestro camino.

El juego se inicia con un tutorial en el que una voz robótica que suena por megafonía, así como también unas marcas visuales, nos indican cómo desplazarnos y cómo llevar a cabo la mecánica de escalada, que podremos realizar en cualquiera de las tuberías de gas que se reparten a lo largo del complejo, siendo en ocasiones la única manera de alcanzar la siguiente zona del escenario. Siempre se agradece la verticalidad que añade esta mecánica en este tipo de títulos, aunque podría haber sido mejor aprovechada.

Una vez pasado el tutorial de movimiento, podremos encontrar la primera arma (una pistola), así como un pase de seguridad. Para llevar las armas con nosotros tenemos el clásico sistema de cinturón, con la capacidad de portar dos armas de mano y un arma grande en el pecho. Existe una mecánica de realidad virtual para la recarga del arma, pero también podemos realizar dicha función simplemente bajándola.

Guardaremos también en el cinturón el citado pase de seguridad. Estos objetos nos permiten abrir puertas que dividen sectores de la planta. Conforme vayamos avanzando en la aventura, serán necesarios pases con un mayor nivel de seguridad, y es que se identificarán en base a un código de colores, siendo verde el inicial y rojo el del tramo final, que abre puertas más cercanas al reactor principal.

Volviendo al tema de las armas, la variedad es bastante buena, incluyendo varias pistolas, fusiles, subfusiles, escopetas y rifles. El manejo de las mismas es correcto, ofreciendo una experiencia bastante arcade, sin apenas retroceso o influencia de la gravedad en el disparo. Además de estas armas, encontraremos repartidos por el escenario unos bidones explosivos que resultarán útiles especialmente cuando estemos cortos de munición o cuando vengan varios zombis a la vez a por nosotros.

Modos de juego, dificultad y duración

Death Horizon: Reloaded, que está totalmente en inglés (tanto voz como textos), cuenta actualmente con solo modo historia para un jugador. En el menú nos dará la opción de continuar la aventura o empezar una nueva, no pudiendo almacenar varias partidas. El guardado se produce de forma automática al superar cada sector, quedando fuera la posibilidad de guardar de forma manual nuestro progreso.

En cuánto a la dificultad, ofrece un total de 4 niveles (fácil, normal, difícil e imposible). El juego resulta bastante asequible si lo disfrutamos en el modo normal, mientras que el modo "imposible" incorpora el aliciente de que contamos con solo una vida para completar toda la historia, y tenemos la posibilidad de comprobar nuestro rendimiento gracias a la tabla de puntuaciones con rankings globales.

De cara a los enemigos, Death Horizon: Reloaded dispone de tres o cuatro tipos de zombis, cada uno con diferente resistencia a los disparos por lo que, según el arma y la distancia a la que disparemos, habrá enemigos que mueran con un solo disparo a la cabeza y otros que requieran de más daño. Los zombis nos atacarán siempre cuerpo a cuerpo, salvo algunos que lanzan bolas de un líquido tóxico a las que podemos disparar antes de que nos alcancen para deshacerlas.

Aumentar la dificultad se incrementa el número de enemigos y disminuye la munición que encontramos por el escenario, la cual encontraremos registrando taquillas y cajones, o en ocasiones encima de alguna mesa o por el suelo. Del mismo modo obtendremos las armas.

Completar la aventura en modo normal nos llevó unas dos horas y media, explorando todas las estancias para encontrar armas y munición. No hay puzles durante la aventura, nuestro objetivo es destruir el reactor principal antes de que se propague el virus al exterior y matar a todo zombi que nos salga al paso durante el camino.

El equipo de DreamDev Studio ha anunciado que incorporarán mediante una futura actualización un modo de oleadas que tendrá soporte multijjugador, así como un nuevo escenario.

Apartado técnico

Sin ser un portento, ni el pico más alto a nivel gráfico que hay en Quest, el apartado técnico es resultón, con un número de polígonos y calidad de texturas buena.

A nivel jugable, dispararle a los zombis nos ofrece una experiencia bastante agradable. Eso sí, se echa de menos la inclusión de desmembramientos, aunque sí que se producen resultados distintos dependiendo de a que parte del cuerpo disparemos.

El rendimiento es bueno, percibiendo solamente caídas de frames en momentos muy puntuales, por ejemplo cuando explosionamos un bidón.

CONCLUSIÓN

Si te gustan los shooters y la temática zombi, y teniendo en cuenta que en teoría próximamente se van a incorporar nuevos modos y contenidos mediante actualizaciones, por 19,99€ que cuesta actualmente en el store de Quest puede ser una buena compra. Sin dichos añadidos y teniendo en cuenta que la campaña es bastante corta, quizá su precio pueda parecer excesivo para algunos.

El juego ha sido analizado con Oculus Quest.