The Persistence: ANÁLISIS

24 JUL 2018  8:32

Hugo

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The Persistence: ANÁLISIS

Embárcate en esta aventura de terror en la que tendremos que intentar sobrevivir a los peligros de la nave Persistence. Exclusivo de PSVR.

Sobrevive a bordo de la nave Persistence

The Persistence es un juego desarrollado por Firesprite y diseñado por Alex Moore en el que trataremos de sobrevivir a los horrores de la nave de colonización Persistence, en la que todos nuestros compañeros han muerto y mutado a seres que nos pondrán la piel de gallina en cuanto nos topemos con ellos. El título nace como una idea original que apuesta por un juego de acción y exploración con elementos de survival horror llevados al extremo, añadiendo a su vez la generación procedimental del escenario, lo que provocará que cada partida sea completamente diferente a la anterior.

 

 

Primeros minutos

Año 2521. Nos encontramos en los alrededores de una estrella colapsante con la intención de investigar un agujero de gusano que tiene un enorme potencial científico, pero la misión que podía haber cambiado radicalmente la exploración espacial acaba convirtiéndose en un desastre, al sufrir la nave un aparatoso accidente debido a una mala calibración de cálculo en distancias siderales y a una serie de infortunios. El resultado es la muerte de todos los tripulantes (incluidos nosotros), pero gracias a un complejo sistema de inteligencia artificial denominado IRIS, somos clonados en un nuevo cuerpo, conservando nuestros recuerdos y sin la sensación de haber muerto hasta que contemplamos con estupor nuestro propio cadáver.

 

Encarnamos a la oficial de seguridad Nimri Eder, mientras el resto de la tripulación, por desgracia, no ha tenido la misma suerte que nosotros, ya que el sistema de clonación, unido a diferentes combinaciones de elementos externos a la nave, se dispuso a reanimar al resto del equipo, creando horrorosas mutaciones de los ya fallecidos tripulantes, los cuales no dudarán en atacarnos a la menor oportunidad.

 

El panorama a bordo de la Persistence no puede ser más desolador; nuestro objetivo es poner en marcha una serie de funciones en la nave para poder regresar con vida a la Tierra, pero siempre rodeados de peligros y de horrorosos mutantes que pueblan los interminables pasillos y estancias de la Persistence. Además, estamos a punto de ser absorbidos por el agujero negro, por lo que nuestro tiempo es oro.

 

Durante los primeros compases de la aventura en los que nos resumen lo que hemos venido a hacer y por qué nos encontramos en esta situación, iremos familiarizándonos con los controles gracias a un entretenido tutorial que desvela los movimientos de nuestra protagonista, que se llevan a cabo mediante movimiento libre o con la posibilidad de realizar teletransporte, aunque no como medio de locomoción general, sino más bien un teletransporte que utilizaremos para superar algún obstáculo o subirnos a ciertas zonas, con lo que se convierte en un añadido en lugar de ser una opción de movimiento propiamente dicha.

 

Las impresiones visuales rayan a buen nivel. Si bien no es el título más espectacular en este apartado, lo cierto es que el nivel de detalle y de resolución están muy bien optimizados, produciendo unos gráficos a la altura de lo que esperamos.

 

En cuanto a los controladores, la única opción disponible es el gamepad, dejándonos con la sensación de que si se hubiera añadido la posibilidad de interactuar con los Move, la experiencia en general hubiera ganado muchísimo en inmersión y dinamismo, aunque debemos de admitir que el control está muy bien implementado.

 

Otro de los aspectos que podemos destacar es la no inclusión de nuestro idioma entre los ajustes de voces, aunque sí dispondremos de la posibilidad de activar los subtítulos y la interfaz en español, Siendo un exclusivo de Sony, nos habría encantado poder disfrutar de esta terrorífica experiencia con las voces en castellano.

 

Después de estos primeros minutos, continuamos por unos pasillos iniciales, explorando y descubriendo una serie de objetos que iremos recolectando a lo largo de toda la historia, como células madre que podremos arrancárselas a los mutantes aún vivos, o diferentes tipos de materia o elementos como Fabchips o símbolos de Eredus que más adelante podremos canjear.

 

A medida que vamos avanzando, nos encontramos con los primeros mutantes, que nos darán más de un susto y saldrán corriendo a por nosotros en cuanto nos divisen. Cabe destacar que en estos primeros minutos, y en forma de tutorial, nos enseñarán a abordarlos de dos maneras diferentes: una utilizando la fuerza bruta, donde en un principio los combates son muy igualados, y pueden hacernos "sudar la gota gorda", si no combinamos bien los bloqueos con los ataques; o la segunda opción, que es mediante el uso del sigilo y las sombras, teniendo que estudiar los movimientos de nuestros enemigos para poder sustraer sus células madre del área cervical, sin levantar mucho revuelo. Como podréis imaginar, esta segunda opción es la más recomendable en estos primeros compases, ya que, como veremos más adelante, es un juego donde la fuerza bruta no es siempre la mejor opción.

 

Todo la historia se desarrolla en un ambiente tenue y desconcertante, aunque podremos usar nuestra linterna para iluminar donde no alcanza la luz ambiental, y como buen juego de terror, será más veces de las que nos gustaría, así que preparaos para una buena sesión de oscuridad. Por otro lado, tenemos un sentido especial que podremos activar cada cierto tiempo, desvelando si tenemos peligros a nuestro alrededor o enemigos, iluminando toda la estancia en un color verde quirúrgico y destacando a los enemigos en rojo.

 

Modos de juego y jugabilidad

Una vez superados con éxito los primeros compases y tutoriales del título, nos adentramos en las profundidades de la Persistence, pero con una ligera sensación de no saber realmente el por qué de cada cosa, como la necesidad de recolectar objetos o qué debemos hacer realmente.

 

Poco a poco iremos averiguando que quizás esta confusión inicial se esté llevando a cabo a propósito, y que los diseñadores han querido que literalmente nos volvamos locos dando vueltas por los interminables pasillos y estancias de la Persistence para familiarizarnos con lo que tenemos a nuestro alrededor y saboreemos la crudeza de sentirnos completamente solos y aislados, como en realidad está nuestra protagonista.

 

En cada nueva sala a explorar, encontraremos nuevos objetos para recolectar y nuevos enemigos a los que combatir. La voz de IRIS se hará notar, proponiéndonos diversas estancias repartidas por toda la Persistence, teniendo entonces que completar una serie de objetivos (5 en total) para poder regresar con vida a la Tierra. Quizás nos puedan parecer en un principio pocos objetivos para un título de tal envergadura, pero será difícil superar con éxito todas estas misiones. Hay que destacar que es un juego en el que hay que estar muy pendientes de todo lo que sucede para no perdernos sin sentido por las profundidades de la nave.

 

Según avanzamos por estos pasillos siniestros y minimalistas, descubrimos que la aventura no será un jardín de rosas, ya que pronto iremos viendo que morir es parte esencial, dado que el nivel de dificultad para hacer frente a los enemigos será muy elevado, sobre todo en los primeros compases de la historia.

 

Cada vez que caigamos en combate tendremos que empezar de nuevo, sin puntos de guardado o posibilidad de reaparecer en un checkpoint (a no ser que superemos con éxito algún objetivo principal), algo que en un principio nos descolocará y nos dará ganas de estampar nuestro gamepad contra la pared, pero que según vayamos avanzando en la historia, entenderemos que morir en The Persistence es algo natural, que sucederá en un momento u otro y que se ha enfocado como un descanso donde reabastecernos para salir más fuertes que la última vez. Aunque hay que matizar varios puntos, ya que cada vez que ocurra volveremos a la vida en un nuevo clon, pero no contaremos con los objetos y armas que hemos acumulado, pero sí los Fabchips, las células madre y los símbolos de Eredus que hemos ido recolectando y que serán vitales para mejorar nuestro personaje y habilidades, ya sea evolucionado nuestro traje para hacerlo más sigiloso, para que se autorrepare después de cada golpe o bien para aumentar nuestra salud, mejorar nuestra cosechadora de células madre o potenciar nuestras armas.

 

El sistema de lucha y combate está enfocado a sentirnos vulnerables en todo momento, ya que es relativamente sencillo morir. Por ello es clave combinar una buena defensa, que se resume en un campo de fuerza que tendremos que saber gestionar para que no se nos acabe en el momento menos oportuno. De cara al ataque, tenemos un correcto sistema con el que dar un buen puñetazo o utilizar cualquiera de las distintas armas disponibles (17 en total), que podremos mejorar para que sean más eficaces, desde una simple pistola a elaboradas bombas que soltarán un enjambre de droides que nos será de gran ayuda en ciertos momentos. Eso sí, el número de balas, de granadas o de cualquier arma, están muy limitados, pues para acceder a un arma o su munición tenemos que fabricarla en unos puntos de creación a los que solo podremos acceder una vez cada cierto tiempo, siendo necesario gastar numerosos fabchips para fabricar una nueva. Cabe destacar que si, por ejemplo, fabricamos un arma de fuego, el numero de balas con el que contaremos suele ser muy escaso, por lo que nos vemos obligados a utilizar el ingenio y el sigilo acompañados de nuestra cosechadora de células madre para acabar con los enemigos.

 

 

Los enemigos disponibles son muy variados y dependiendo de la zona en la que estemos podrán aparecer unos u otros, ya que en el grueso del mapa nos encontraremos a mutados con o sin armas de fuego, siendo estos los más comunes, pero según avancemos y entremos en diferentes zonas, encontraremos a gigantescos enloquecidos, difíciles de superar y que nos golpearán con fuerza en cuanto tengan la más mínima ocasión; merodeadores que nos aguardarán en cualquier esquina esperando que pasemos a su lado para darnos un susto de muerte y atacarnos sin piedad; torres defensivas con forma de androide que sobrevolarán las numerosas estancias en busca de cualquier intruso; pero sin duda, de todos los mutantes que encontramos a lo largo de la aventura, uno de los más destacados y tenebrosos son las denominadas lloronas, cuyo llanto en la lejanía nos pondrá los pelos de punta y cuando las intentemos golpear o disparar, desaparecerán para salirnos donde menos lo esperemos gritando y dándonos un susto que nos hará replantearnos si seguir con el visor puesto.

 

Quizás uno de los puntos que menos nos han gustado, debido a la decisión de los diseñadores de tener que morir decenas de veces y por el camino perder todas las armas que tengamos, es lo repetitivo que se puede llegar a hacer el juego, ya que nos pasará en varias ocasiones estar casi terminando un objetivo y justo al final morir, llevándonos a empezar de nuevo y provocando que nos entren ganas de tirar la toalla.

 

Por otro lado, solo disponemos de dos modos de juego, que son el modo campaña y el modo supervivencia, al que solo podremos acceder cuando terminemos con éxito la historia y en el que, como indica su nombre, el objetivo será intentar sobrevivir a oleadas de mutantes por las profundidades de la Persistence. Respecto a esto último, creemos que hubiera estado mejor poder acceder al modo de supervivencia desde el principio.

 

Mientras vamos superando uno por uno los cinco objetivos disponibles, iremos explorando muchas estancias y habitaciones, y en muchas de ellas de ellas encontraremos parte de la tripulación que no ha mutado después del desastre inicial, pudiendo adquirir sus células madre aún incorruptas para clonarlas y manejarlas si así lo deseamos. Cada nuevo personaje tendrá una serie de características diferentes a los demás, con lo que alguno podrá ser especialmente sigiloso o tremendamente fuerte, según la opción que desbloqueemos. Para desbloquear a estos personajes, una vez adquiramos sus células madre o ADN, tendremos que gastar una cantidad de Fabchips determinada, con lo que estamos obligados durante todo el juego a ir recolectando materiales para poder tener siempre disponibles los mejores equipos o personajes para superar con éxito esta aventura.

 

 

Sistema procedimental y duración

The Persistence no es un survival horror al uso, ya que como os decíamos, tendremos que morir en numerosas ocasiones para llegar a superar con éxito todos los objetivos y volver a la Tierra sanos y salvos. Además, uno de sus grandes atractivos es el continuo cambio procedimental de escenarios, que sufriremos cada vez que perdamos la vida y volvamos a ser clonados, dotando al título de un dinamismo poco común en los juegos disponibles dentro del género. En un primer momento pensaremos que todo este cambio de pasillos, estancias y objetos solo contribuye a que aumentemos esa sensación de no saber qué hacer en el juego, pero poco a poco comprendemos que es una verdadera maravilla experimentar la tensión a la que nos transporta en todo momento, con la sensación de estar recorriendo una nueva zona del juego e invintándonos a rejugar el título siempre que queramos, ya que siempre encontraremos un nuevo mapa al que jugar, lleno de trampas y mutantes que nos harán tener pesadillas por la noche.

 

Quizás debido al diseño del juego, el cual destacábamos que estaba orientado a que muriésemos más veces de las que nos gustaría, dota al título de un tiempo extra para poder superarlo con éxito. Por lo general, lo normal es que nos cueste más o menos unas 8 horas superar con éxito los cinco objetivos de la historia principal, aunque como siempre, todo dependerá de la habilidad que tengamos para afrontar los peligros, ya que habrá jugadores con más habilidad en los combates cuerpo a cuerpo y otros en cambio serán más diestros a la hora de emplear el sigilo.

 

 

The Persistence App

No podíamos obviar uno de los mejores puntos que puede tener el título y menos aún sin incluirlo en un apartado propio, ya que como ya sabíamos, otro de los aspectos destacados es la denominada The Persistence App, y que como su nombre indica es una aplicación gratuita que podemos encontrar para nuestros smartphones y tablets Android e iOS.

 

Gracias a esta herramienta, hasta cuatro personas pueden conectarse mediante la misma red WiFI al juego y, dependiendo de lo buenos o malos amigos que tengamos, podrán ayudarnos o perjudicarnos según su antojo. Cabe destacar que, gracias a la app, ciertos niveles en particular y el juego en general, podrán ser superados con más facilidad o dificultad, ya que si nuestros amigos se limitan a ayudarnos, veremos los objetos disponibles en cada estancia nueva, podrán apagar las luces para que no nos detecten, atraer a enemigos o incluso congelarlos durante un breve espacio de tiempo para ayudarnos a eliminarlos. Con cada ayuda que recibamos o nuevo objeto que nos descubran, irán recibiendo una serie de puntos canjeables desde la aplicación, donde podrán adquirir varias mejoras. A su vez, les irán dando una serie de beneficios si, por ejemplo, les dicen que nos deben de perjudicar en algún punto. En este caso, podrán atraer enemigos a nuestra posición o no advertirnos de alguna zona no segura o peligro a nuestro alrededor.

 

Lo cierto es que la experiencia general del título cambia radicalmente cuando tenemos a alguien conectado desde la aplicación, siendo por lo general bastante grata, además de una muy buena forma de jugar en cooperativo. Por ello, nos parece todo un acierto, pues no es la típica app que no sirve para nada de algunos juegos.

 

Desde la app, tendremos una panorámica completa en la que veremos a la protagonista y podremos interactuar con cada interrogación para ver si se trata de un enemigo o un objeto valioso

Sonido y ambientación

En el aspecto sonoro nos encontramos con un abanico de sonidos, ruidos y melodías bastante correcto para lo que esperamos de una experiencia de terror como es el caso, llegando a ser un aspecto fundamental en ciertos puntos de la historia, ya que unido al notable sistema posicional, donde posicionaremos cualquier peligro en la dirección indicada, podremos llevarnos verdaderos sustos de muerte debido al volumen y nitidez de ciertos sonidos.

 

Tanto las armas de fuego, las explosiones o efectos que iremos observando a lo largo de la aventura, están a un gran nivel, y, por ejemplo, escuchar a un mutante arrastrando una maza mientras camina en la lejanía por los metálicos pasillos es una experiencia bastante desagradable (en el buen sentido de la palabra).

 

A lo largo de los interminables pasillos y estancias notaremos ese vacío de un lugar que hasta hace poco estuvo repleto de tripulantes y personas vivas, jugando con nosotros esa falsa sensación de seguridad que notamos cuando pensamos que estamos en casa, pero que algo raro ocurre, ya que una estancia aparentemente normal y tranquila puede volverse una pesadilla para nuestros sentidos cuando la luz se apague de golpe, escuchemos algún ruido ensordecedor o encontremos a algún mutante emitiendo sonidos desagradables frente a nosotros.

 

Por lo general, la Persistence es esa típica nave futurista, donde todo el decorado está pensado de una forma minimalista y los reflejos de nuestra linterna o de alguna luz de emergencia ensucia los pulcros pasillos y objetos.

 

 

CONCLUSIÓN

The Persistence no es un survival horror al uso, ya que tanto su sistema procedimental de mapas como su complejidad a la hora de afrontar los objetivos y desafíos disponibles a lo largo de la aventura hacen que siempre tengamos la sensación de estar ante una nueva zona que explorar o tengamos muy presentes que morir es parte fundamental del juego.

 

Quizás debido al numero de muertes que sufriremos a lo largo de la aventura y el tener que reaparecer sin armamento desde el comienzo al caer en combate, pueden ser motivos suficientes para que un grueso de jugadores se den por vencidos a las mínimas de cambio, ya que resulta bastante frustrante en ocasiones quedarse a las puertas de superar un objetivo. Pero en eso se basa, pues así vamos mejorando nuestro personaje. Los puntos de guardado solo ocurren al conseguir objetivos principales, provocando así que pueda parecernos repetitivo y "pasillero" en ciertas ocasiones.

 

Los niveles de terror mostrados en el juego están a la altura de lo esperado en un título del género, aunque debido al numero de veces que debemos de reaparecer y superar las decenas de estancias y pasillos lúgubres una y otra vez, pueden hacer desaparecer el miedo y el suspense inicial, pero gracias a unos buenos enemigos, diseñados en ciertos casos para asustarnos sin piedad, no podremos relajarnos ni un solo minuto.

 

Por lo general, está a gran altura tanto en gráficos como en calidad visual, logrando atraparnos en la sensación de agobio que experimenta nuestra protagonista, con una duración aproximada de unas ocho horas para superar la historia, la cual creemos que va de menos a más según vamos entendiendo las mecánicas del juego, ya que al principio todo puede resultar un poco confuso si no estamos atentos a lo que nos cuentan.

 

Tendremos que recolectar todo lo que encontremos para poder mejorar las armas o a nuestra protagonista, así como para comprar armamento a lo largo de la Persistence. Por otro lado, además de los dos modos para un jugador, es todo un acierto la posibilidad de poder conectar hasta cuatro dispositivos móviles, como nuestra tablet o smartphone, para así ayudar o perjudicar, en la campaña, al jugador que está con el visor puesto, ganando muchísimo la experiencia, tanto para el jugador principal como para los partícipes desde la aplicación.

 

The Persistence es una gran opción para los amantes de los juegos de acción, exploración y terror.

+ Entretenido

+ Mapas generados de forma procedimental

+ Posibilidad de conectarse mediante app con hasta cuatro amigos

- Voces en inglés

- Puede ser repetitivo

- Morirás muchas veces y empezarás de nuevo sin tu arsenal

8 "Muy bueno"

The Persistence (PlayStation 4)

8

Lanzamiento / Julio 24, 2018

¿Puedes sobrevivir a The Persistence? Atrapada en la inexorable atracción de un agujero negro y con una tripulación que ha mutado en horribles y homicidas aberraciones, depende de ti, un clon de la ...

Nota de los usuarios

9