The Walker: ANÁLISIS

Golpe en la pequeña China

Un título que nos ofrece esa iniciativa llamada China Hero Project, en el que nos meteremos en la piel de un exorcista oriental, dispuesto a mandar demonios de vuelta al infierno a tiros.

China Hero Project es una iniciativa promovida por Sony a mediados del 2016 con el fin de dar visibilidad a desarrolladoras provenientes del gigante Asiático. Unos 400 proyectos fueron registrados al comienzo de este proyecto, de los cuales solo 10 verán la luz finalmente. The Walker es uno de esos 10 títulos fruto de esta iniciativa, producto de la colaboración entre las desarrolladoras Haymaker y Renyi Technology. Consiste en un shooter por oleadas con una curiosa ambientación y algunas interesantes mecánicas jugables, por las que intenta destacar en un género tan saturado en el catálogo del visor de Sony, pero que no termina de hacer brillar sus virtudes.

Argumento

The Walker comienza con el protagonista llegando a su casa (parece que llega de viaje). Un piso con un toque siniestro muy bien ambientado y cargado de detalles, encendemos un flexo y encontramos algo que no debería estar ahí, un libro que parece antiguo, abrimos el libro y empiezan a pasar algunos sucesos inquietantes, se apaga la luz, se enciende la tele en la que solo vemos estática y por una ventana empieza a soplar un extraño viento. Tras esto oímos unos pasos a nuestra espalda, pero no hay nadie, entonces aparece una especie de monje, que nos explica (las voces son en Chino, pero el juego está subtitulado en español) que somos descendientes de una antigua estirpe de exorcistas y que tenemos que hacer honor a nuestro linaje, deteniendo una diabólica amenaza surgida de lo mas profundo del infierno. Un comienzo muy prometedor. He de decir que durante todo este prólogo la atmósfera y ambientación está muy bien conseguida, una escena con buen ritmo y que me hizo pensar en que por fin había encontrado un shooter por oleadas con un argumento interesante.

A partir de este punto pasamos a un tutorial y el hilo argumental prácticamente desaparece, limitándose a algún comentario más o menos afortunado antes de empezar un nivel, una verdadera lástima, porque ciertamente el principio es bastante interesante, y si se hubiera aprovechado para darle un poco más de peso al argumento, The Walker podría haber destacado por encima de otros juegos de su género, que se limitan a dejarnos en el escenario y poco más.

Jugabilidad

Básicamente es un shooter por oleadas, esto es, estando estáticos debemos rechazar hordas de enemigos utilizando armas de fuego (un poco irónico llamándose The Walker), pero tiene algunas peculiaridades que hacen la experiencia más interesante que otros exponentes del género. Aquí solo tenemos dos armas, un revolver con munición infinita, que deberemos recargar cada 6 disparos, y una espada para ataques cuerpo a cuerpo, la adición de la espada genera algunas mecánicas bastante divertidas y originales como son detener proyectiles y poder rechazar ataques cercanos, como manotazos dejando al enemigo aturdido unos instantes, momento que se aprovecha para atacar con la espada o acribillar al enemigo, mecánica especialmente útil y satisfactoria con el primer jefe final.

Además, tendremos a nuestra disposición una especie de pergaminos, con poderes de hielo y electricidad, que nos permitirán encantar las armas durante unos segundos. Los enemigos atacan en todas las direcciones, lo que nos hará estar continuamente pendientes de nuestra espalda, generando algunos momentos de tensión, pocos, puesto que los enemigos son bastante lentos y predecibles. Además de poder detener los proyectiles, podremos esquivarlos, algo que funciona bastante bien y que da algo de emoción sobre todo en los niveles de dificultad más elevados. Recomiendo jugar de pie para poder aprovechar mejor esta mecánica.

Cuenta con 5 escenarios diferentes y dos jefes finales, reduciendo la duración del título a unos 40 minutos, aunque tras la primera vuelta nos pondrán a nuestra disposición dos armas nuevas (una espada bastante grande y un subfusil) para poder afrontar una segunda vuelta con mayor dificultad (esta segunda vuelta representa un reto más interesante y entretenido que la primera), aun así 5 escenarios se hacen bastante escasos. Además, una vez completada la primera vuelta tendremos acceso a un modo infinito, en el que iremos superando oleadas de dificultad creciente. Mención especial a los jefes finales, que obligan a poner en práctica la esquiva y la detención de ataques cuerpo a cuerpo, siendo enfrentamientos bastante intensos y los mejores momentos del título.

El título se juega con los moves, aunque da la posibilidad de jugar con el gamepad, esta opción no es muy recomendable. En la mano derecha tendremos el arma, usando el botón move para cambiar de arma y el gatillo para disparar, mientras que el botón "X" y el "O" para realizar giros de 45º. Algo necesario puesto que los enemigos atacan de todas las direcciones y los moves debido a las limitaciones del sistema, cuando intentas darte la vuelta para atacar a los enemigos a tu espalda, pierden el seguimiento, dejándote a merced de estos. Con la mano izquierda únicamente invocaremos los pergaminos de poder y los aplicaremos sobre el arma. Desgraciadamente el seguimiento no está del todo pulido, un problema que notaremos sobre todo al intentar atacar con la espada.

Gráficos y sonido

Gráficamente está lleno de luces y sombras. Tiene escenarios bastante competentes, por ejemplo tu piso, que sin ser una maravilla, luce bien y consigue transmitir la atmósfera oscura y tenebrosa del título. También los callejones oscuros de la ciudad de Shangái están bastante conseguidos. En cambio los escenarios más iluminados pierden bastante, dejando a la vista unos modelados poco detallados y mal definidos. Nos encontramos con unos enemigos detallados, pero faltos de variedad, siendo básicamente tres enemigos diferentes y dos jefes, haciéndose bastante repetitivos, estos tampoco tienen unas animaciones brillantes y en ocasiones los puntos de respawn de los enemigos están a la vista del jugador, viendo como aparece un enemigo de la nada, restando inmersión. En ocasiones aparecen NPCs en los escenarios, al igual que los enemigos están faltos de variedad y tienen unas animaciones bastante robóticas. Las armas en cambio lucen bastante bien, aunque les falta algo de definición.

El sonido es uno de los grandes problemas en The Walker, siendo un título que busca crear una atmósfera tétrica y sobrenatural, nos encontramos con unos efectos de sonido escasos y que en ocasiones se desincronizan con lo que estamos viendo, como ventanas que se rompen y no suenan (mientras que otras sí), NPCs que están gritando y se oyen a veces, pasos de enemigos que no suenan. Además, si a esto le juntamos unos efectos para las armas nada destacables, dejamos un apartado sonoro bastante pobre y poco trabajado.

En cuanto a la música, nada que decir, puesto que no hay, ni tan siquiera en los menús. Algo totalmente incomprensible en un juego como este, en la que se podría usar para remarcar los momentos de tensión y dar ritmo en los de acción más desenfrenada.

CONCLUSIÓN

The Walker es un quiero y no puedo, un juego con buenas ideas pero sin la ambición de llevarlas a cabo competentemente. Una autentica pena, puesto que muchas ideas de las que plantea podrían haberlo hecho brillar en un género lleno de títulos mediocres, aportando un soplo de aire fresco y originalidad entre tanto shooter genérico. Una propuesta que entra muy bien de primeras, pero una vez nos metemos en faena no podemos pasar por alto sus defectos. Se nota que se han puesto buenas intenciones en The Walker, pero ya sea por falta de medios o de conocimientos se ha quedado solo en eso... intenciones.