Starblood Arena - PSVR: ANÁLISIS

Jugabilidad

Llegamos a un punto donde quizás no nos encontremos sorpresas, pero que en líneas generales está bien cerrado teniendo en cuenta el tipo de juego que nos ocupa. Y es que Starblood Arena no oculta en ningún momento que es un juego orientado hacia el multijugador online, y que como hemos señalado, bebe de referentes actuales como el aclamado Overwatch, y que al igual que en este nos encontraremos en un universo de tipo cartoon, con personajes de lo mas pintorescos y variopintos entre los que podremos elegir para llevar a cabo nuestras masacres. Cada uno de ellos cuenta con una nave y habilidades propias así como un ataque o función especial que podremos activar durante la partida, y por tanto deberemos de conocer profundamente al personaje que estemos utilizando para sacar el mayor partido posible a sus habilidades.

 Entre los modos de juego nos encontraremos clásicos como deathmatch, deathmatch por equipos, oleadas de hordas, donde tendremos que proteger ciertas localizaciones de un mapa y aguantar tantas oleadas como sea posible, y football, donde como su nombre indica libraremos un partido de football entre todo el caos y los disparos. Estos modos están disponibles tanto en el multijugador online como en el modo individual, donde nos podremos enfrentar a bots para mejorar nuestras habilidades (algo esencial si queremos familiarizarnos con un personaje o intentar llegar a lo mas alto del ránking) o seguir una especie de modo carrera donde la IA enemiga nos pondrá las cosas bastante difíciles.

Los controles como ya habíamos mencionado en al apartado anterior se realizan mediante el Dualshock 4, con el que tendremos cuatro esquemas diferentes de control, dos que invierten el eje Y y dos que no, y a su vez cada uno de los esquemas de estos dos grupos nos permitirán controlar el desplazamiento en el eje Y, a costa de un control mas complejo para la rotación del eje transversal de nuestra nave o no tener control sobre el desplazamiento Y, pero tener un control mas cómodo sobra la rotación del eje transversal. En definitiva, a pesar de que el juego pide a gritos un control con HOTAS, el control con el Dualshock 4 es bastante satisfactorio y no tendremos problemas para hacernos con la nave tras unos minutos de pilotaje.

Para terminar comentaremos que la cantidad de contenido puede parecer limitada si nos dedicamos solo al modo individual, pero hay que recordar que el juego tiene un enfoque totalmente multijugador, ofreciendo acción directa y gratuita, tremendamente divertido en compañía y muy adictivo para los amantes del género.